Electroencefalografía (EEG)

¿Qué es un electroencefalograma?

La electroencefalografía o EGG, es una técnica de registro de la actividad bioeléctrica del cerebro. La transmisión de información entre neuronas genera una señal eléctrica detectable en la corteza cerebral. Los potenciales eléctricos se miden a través de unos electrodos colocados en la superficie del o cuero cabelludo. Consiste en medir las ondas cerebrales o corrientes eléctricas producidas por un estímulo particular, asociándose a diferentes estados de excitación.

Las neuronas cuentan con unos canales de iones, que conectan el espacio intracelular y extracelular. En reposo, los canales permanecen cerrados. Al realizar una acción, las redes de neuronas involucradas se activan al paso de una señal eléctrica, el potencial de acción.

La EEG tiene ciertas limitaciones frente al resto de técnicas como por ejemplo la resolución espacial de la que dispone, ya que es baja frente a la del resto. Esto es debido a la localización de los electrodos en el cuero cabelludo dado que no puede captar a la perfección la señal de hacia dónde se dirigen las neuronas en el cerebro durante ese estímulo. No se obtiene información del interior del cerebro. Por otro lado, tiene una resolución de tiempo muy alta, y un coste mucho más reducido que la Fmri. Es una técnica muy utilizada en neuromarketing.

Los electrodos suelen estar unidos a un casco, que se coloca en la cabeza del sujeto objeto del estudio. Es importante determinar previamente al experimento que todos están en funcionamiento. Existen diversas maneras de ordenar la colocación de los electrodos en el cuero cabelludo, siendo la más habitual la forma 10-20.

¿Para qué se utiliza el electroencefalograma?

Mediante la EEG se pueden medir 5 ondas cerebrales diferentes:  Beta, Alfa, Theta, Delta y los menos conocidos Gamma.

Cada frecuencia, en ciclos por segundo (Hz), representa un nivel específico de la actividad cerebral.

  1. Gamma (por encima de 40 Hz): Son ondas con menor amplitud respecto a las demás cuando se muestran en el EEG (Electroencefalograma)  y han sido consideradas durante mucho tiempo como las ondas que retienen la información del cerebro y de los sentidos. Se producen en estados de vigilia, o sea, en estado consciente.

Por este motivo, una persona con altos niveles de ondas gamma suele estar asociada a altos niveles de inteligencia, auto-control, compasión y un sentimiento de felicidad generalizado.

Las ondas gamma cerebrales tienen una fuerte vinculación con la memoria y una mayor percepción de la realidad.

  1. Beta (14-40Hz): las ondas cerebrales beta se asocian con la conciencia normal, estado de alerta, lógica y razonamiento crítico.  

Importante en la vida cotidiana, los niveles altos se traducen en estrés, ansiedad e inquietud. 

 

  1. Alfa (7.5-14Hz): Presentes en una profunda relajación con los ojos cerrados y por lo general, mientras se sueña despierto.  

Alfa aumenta su imaginación, la visualización, la memoria, el aprendizaje y la concentración.  

 

  1. Theta (4-7.5Hz): Las ondas cerebrales theta están presentes durante la meditación profunda y sueño ligero, incluyendo el estado de sueño REM. 

 

  1. Delta (0.5-4Hz): La frecuencia Delta es la más lenta y está presente en el sueño profundo. 

Cada canal  representa la actividad en una zona captada por un sensor. Este dispositivo de EGG cuenta con 18 sensores. Las ondas presentes no son más que las oscilaciones en una zona del cerebro de los procesos del potencial de acción.

  

Para medir la respuesta eléctrica del cerebro de un consumidor, generalmente se utilizan potenciales evocados, que son técnicas para registrar la respuesta del cerebro a diferentes estímulos, que se aplican con la intención de despertar emociones o respuestas determinadas. Pueden ser auditivos, visuales…



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